14 diciembre 2014

UN GRAN MOMENTO

Ya ha pasado tiempo desde la última entrada y quizá, sólo quizá, hayan pasado demasiadas cosas en todos los planos de mi vida. No tantas en el deportivo, que es de lo que tratamos aquí: sigo entrenando y no he vuelto a competir desde el triatlón de junio.

La gran noticia es que ha venido a invadir nuestra casa, nuestro tiempo, nuestras vidas, una niña no tan pequeña por el peso al nacer. Parece que goza de buena salud y salvo los típicos gases, etc. no está dado excesiva guerra a sus padres. Sobre todo al padre ya que una madre, por mucho que vaya todo bien, debe estar disponible 24 horas en estos comienzos.

Eso fue hace algo más de 2 meses y, evidentemente, ha cambiado todo. Aunque quizá no cambia tanto tu forma de pensar. Al menos yo quiero seguir entrenando y ver si llego bien al verano. Sigo trabajando y no he pedido reducción de jornada e intento no pensar lo que tengo en casa y concentrarme.

Sí cambian las rutinas. Lo inmediato lo marca la peque. El resto debe adaptarse. Al menos lo no trascendental y ahí entra el deporte. Los horarios se tienen que adaptar y debe haber cambios.

Y, en contra de lo que se podría prever, estoy en un momento de forma bastante bueno (para ser diciembre, que fuera de contexto parece que estoy para correr maratones), como hace que no estaba. Que la peque esté bien y haberme guardado vacaciones para juntar eso días con la baja y ayudar a mi pareja, me ha permitido durante mes y medio salir con la bici, correr y nadar de manera continuada. He perdido algo de peso; no mucho, pero sí estoy más delgado.

Con la vuelta al trabajo la cosa se ha complicado. Intento buscar el momento de ir a nadar y correr entre semana. No puedo, ni debo ni quiero, faltar 1-2 horas cada tarde por el entreno. La bici queda para el fin de semana, como antes, los fines de semana que se pueda.

Con todo, vamos haciendo. Con peros, eso sí. He cambiado de piscina. He vuelto a una de 25 metros (la de antes no los medía) y el resultado ha sido muy decepcionante volviendo a tiempos de hace dos años. Creí que este tiempo había mejorado bastante y la bofetada a la moral ha sido importante. No hay otra que nadar, nadar y nadar.

En la bici no veo gran cambio. Todo igual. El plan es comprarme un rodillo, que me de algo de flexibilidad y no depender del tiempo, sobre todo en invierno. El objetivo es mantener carga de trabajo en bici en esta época no favorable.

En la carrera a pie sí noto mucha mejora. Antes del acontecimiento trabajé mucho las cuestas y ahora intento seguir el plan que el club dispone con el nuevo entrenador. En las series parece que no cuesta ya bajar de 5 minutos de manera relativamente cómoda. Vamos a ver donde llegamos y espero ser respetado por las lesiones.

Un buen momento en lo deportivo, que espero pueda llevarme a un gran momento en verano, y un gran momento, único, en lo personal.

Go!